Hablamos de la reforma de salud y de alternativas curativas, pero que hacemos verdaderamente en la práctica?

Poco caso hacemos de las campañas antialcohólicas y ministeriales. Nos espeluznan las estadísticas sobre la adicción al alcohol, fármacos y drogas de muchos hombres, mujeres, jóvenes, niños y ancianos.

Gota a gota del dicho líquido, no sólo causa dependencia, sino es un atentado contra la sociedad y la salud de las personas.

Hasta dónde ésta enfermedad ha contribuido a que el ser humano alcohólico haya descendido a lo más bajo y menosprecie su autoestima.

Tristemente leemos en la prensa sobre los fatales accidentes automovilísticos, somos también testigos del deterioro de muchas familias y de la enorme pérdida de elementos artísticos y personalidades importantes que podrían ayudar a aumentar nuestro desarrollo intelectual todo esto a causa del alcoholismo, la drogadicción y la farmacodependencia qué lastimosamente son también causal de desempleo, desolación y pobreza. El respeto a la vida no existe más.

Muchas asociaciones, compañías, consorcios e industrias además de las fiestas de barrio, las de la comuna, organizan fiestas y reuniones ; todo lo que signifique un encuentro social, político, cultural o religioso, danzan alrededor del " alcohol".

Con el alcohol en algunas reuniones se propicia una estimulación para lograr un objetivo, llámese éste como se llame.

Porqué mucha gente no puede ser alegre sin él estímulo del alcohol?

Podemos resumir: el alcohol y las drogas destruyen la sociedad.

No creen Uds. qué hay más de una razón para reducir o quizás eliminar el alcohol de nuestras fiestas y reuniones?

Queridos lectores y amigos, la alegría se encuentra en el corazón y en la satisfacción de saber qué lo que hacemos, lo estamos haciendo bien.

Sí hay que hacer algo, hagámoslo hoy.

En la carrera de hacer el bien, nadie se nos adelantará.

: